Después de todo este tiempo sigo sin entenderte.

Hace bastante que hablamos pero hace poco que llegaste a ser mi mejor amigo, siempre has estado ahí y se que siempre estarás, lo sé, lo sé porque confío en ti... Pero poco a poco me doy cuenta de que cada vez te entiendo menos, o quizá te conozco mejor y me surgen nuevas preguntas sin respuesta alguna. Las discusiones aumentan mientras yo pienso que deberían disminuir con el tiempo, quizás es que cuanto más quieres a una persona más te joden alguno de sus actos y palabras. Pero cada vez peor, no sé si eres tú o soy yo. No sé como tengo la jodida habilidad de echar por la borda lo que más quiero que dure. Mis acciones van en contra de mis pensamientos, quiero mantener en pie lo que día a día echó abajo con cada tontería. Pero no, ni de coña puedo dejar que esto termine, sé que te cabreo día si y día también con mis tonterías, pero te prometo que te quiero y no quiero que te vayas, que te necesito aquí conmigo siempre, porque eres de las pocas personas que son capaces de sacarme una sonrisa mientras cae una lágrima, se que aunque te haga cabrear a menudo, tú tampoco quieres que esto termine. Quiero prometerte que no habrá ni una discusión más, igual que tú prometiste una vez, pero quiero que ahora lo cumplamos los dos de verdad.